Por: Sucre Julian Barrera---
Hoy, momento de este monólogo.---
Seis de la mañana. Enciendo el televisor, ando la mayoría de los canales, sobre todo los de análisis y comentarios.En verdad, son retratos del alma de aquellos que los producen, en verdad son personas sinceras
Estos programas despertaron mi interés en la campaña electoral de 1978, tremendo evento, donde todas las fuerzas políticas participantes y no participantes no tenían punto medio, o con Balaguer o en su contra.
Los grupos de izquierda, luego de tanto hablar de que las elecciones no servían más que para legalizar el sistema vigente, participan en las mismas en busca de espacio, según ellos para denunciar.
El PLD con Bosch como su candidato pretende ser la diferencia entre un PRD que aspira a ganar, y hasta bueno fue que resultara ganador en esa campaña, y el PRSC con el Dr. Balaguer pretende continuar.
A diferencia de las persecuciones por motivos políticos, que ahora ya no están, los actores gobernantes y los actores opositores no ofrecen nada diferente en el escenario político.
Los que están en el gobierno justifican su accionar y los de la oposición, siempre y en todo caso, son ciegos a los aciertos de quien gobierne y se convierten en sus verdugos implacables cuando entienden que estos se han equivocados.
El PLD y el PRD son las fuerzas políticas gobernantes y ellos se turnan para gobernar, de ellos, quien permanezca mas tiempo dirigiendo desde la Casa Presidencial es aquel que posea mejores condiciones y arte para gobernar.
Por qué titulamos Pantomima/Hipocresía este articulo?
Verá usted, ya dijimos que los comentarios de quienes hacen programas de televisión son retratos del alma de los mismos, dígame usted solo uno que sea imparcial.
¿Cuántos de ellos, con toda razón, obtienen beneficios del Estado y cuántos hacen turno por lo mismo?
Pantomima o Hipocresía? En cuanto al papel que en cada momento, dependiendo si estoy arriba o abajo, juega el actor político, estos deberían ser más sinceros con ellos mismos, con solo intercambiarse el discurso al subir o bajar del Palacio es suficiente.
Al mismo instante que pasamos de gobernantes a opositores nos juramentamos como víctimas de quien acaba de subir... y quien sube es el malo.
Si llueve o no llueve, quien gobierna es culpable. Si hace frio o calor, quien gobierna es culpable.
El hospital o escuela que yo no hice cuando gobernaba, ahora quien
gobierna es culpable.
El ciclón que viene o el que pasó quien gobierna es culpable.
El “bueno” está en la oposición, el “malo” está en el Palacio Presidencial.
El “feo” siempre será un pueblo que espera soluciones a sus problemas primarios: Salud, educación, alimentos y trabajo.
Ser político no es malo, malo es la irresponsabilidad de algunos con la que asumimos esta tarea.
En estos momentos de agitación electoral nuestro pueblo necesita de los mejores hombres y mujeres que entienden que su país es la Patria y como tal debe permanecer sobre todo.
www.realidadesdepedernales.com
0 comentarios:
Publicar un comentario