El ingeniero José Rafael Sánchez, con su esposa María Margarita Betancourt y la hija de ambos, Rosmery.

María Margarita Betancourt, esposa  del ingeniero José Rafael Sánchez Valerio, secuestrado  el  viernes 29,  en Minca, un poblado a unos 14 kilómetros de Santa Marta, departamento Magdalena, Colombia, clamó hoy a sus raptores para que en lo inmediato le permitan recibir tres medicinas que debe tomar diariamente para el glaucoma ocular, la hipertensión y la diabetes.
La colombiana, esposa de Sánchez Valerio, con quien se casó hace 25 años en Santa Fe de Bogotá, ha elevado una petición a los secuestradores (de los que las autoridades piensan que se trata de delincuentes comunes, pese a que por teléfono se identificaron como paramilitares desmovilizados), está desesperada porque sabe que sin esos medicamentos la vida del plagiado corre grave peligro.
El ingeniero  Sánchez Valerio,  es propietario de una finca de veinticinco hectáreas, en la que cultiva flores para exportación  desde hace 16 años.
 El matrimonio ha procreado una hija llamada Rosmery, quien es  una  profesional universitaria.
El canciller Carlos Morales Troncoso instruyó al embajador dominicano en Colombia, Héctor Galván, para que dé un seguimiento directo al rapto de Sánchez Valerio, quien lleva unos 16 años dedicado al cultivo de flores en Minca, un poblado a unos 14 kilómetros de Santa Marta.
De inmediato, el embajador Galván se puso en contacto con el coronel Hermes Díaz, comandante de la región ocho de la unidad de antisecuestro de la Policía  colombiana, organismo que se ocupa de la búsqueda del dominicano junto a una tropa especializada del Ejército de Colombia, en el área de montaña.
El diplomático sostuvo, además, una reunión con el capitán Víctor Javier Reyes Reyes, del departamento de Magdalena,  quien le confirmó que se ha desplegado todo un operativo anti-secuestro.
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