27
Febrero 2013, 7:29 AM
El buscador de Internet Google ha dedicado su logo “doodle” a la
Independencia de Republica Dominicana, de la cual hoy miércoles 27 de febrero
se conmemora el 168 Aniversario. La Guerra de Independencia Dominicana le dio
su independencia de Haití en 1844. Antes de la guerra, toda la isla La Española
había estado bajo el dominio haitiano durante 22 años cuando Haití ocupó el
nuevo estado independiente llamado Haití Español en 1822.
Antecedentes
En 1801, Toussaint Louverture llega a Santo Domingo y proclama la abolición
de la esclavitud en nombre de la República Francesa. Poco despuésNapoleón envió
un ejército que sometió toda la isla y la gobernó durante unos meses. Los negros
y mulatos nuevamente se alzaron en contra de los franceses en octubre de 1802 y
finalmente los derrotaron en noviembre de 1803.
El 1 de enero de 1804, los vencedores declararon a Saint-Domingue como la
república independiente de Haití. Después de la derrota a manos de los
haitianos, una pequeña guarnición francesa permaneció en Santo Domingo.
La esclavitud fue restablecida y muchos de los emigrantes colonizadores
españoles regresaron. En 1805, tras coronarse emperador, Jean-Jacques
Dessalines invadió la parte oriental, llegando a Santo Domingo, pero tuvo que
retirarse ante un escuadrón naval francés. En su retirada a través del Cibao,
los haitianos saquearon las ciudades de Santiago y Moca, matando a la mayoría de
sus residentes e iniciando dos siglos de animosidad entre los dos países.
Los franceses gobernaban en la parte oriental de la isla hasta que fueron
derrotados por los habitantes españoles en la Batalla de Palo Hincado el 7 de
noviembre de 1808 y se vieron obligados a concretar la rendición definitiva de
Santo Domingo, el 9 de julio de 1809, bajo la presión de la Marina Real
Británica.
Las autoridades españolas mostraron poco interés en su colonia restaurada, y
el siguiente período se recuerda como España Boba. Este desinterés por la
colonia de Santo Domingo se debió a la Guerra de la Independencia Española y
al proceso independentista en muchas de las colonias españolas en América. Otro
pretexto por el desinterés en la colonia fue el agotamiento de todas las
riquezas de la misma, también esta tenía poco estímulo para la producción de
riquezas y bienes.
Los grandes ganaderos llegaron a ser líderes en el sureste donde la "ley del
machete" gobernó por un tiempo. El ex capitán general y escritor José Núñez de
Cáceres declaró la independencia de la colonia llamándola Haití Español el 1 de
diciembre de 1821, solicitando la admisión a la República de la Gran
Colombia.
Invasión y ocupación haitiana (1822-1844)
Debido al poco apoyo internacional, a tan sólo nueve semanas más tarde de que
Núñez de Cáceres declarara la independencia, las fuerzas militares
de Haití dirigidas por Jean Pierre Boyer ocuparon el país.
Desde que Boyer tomó posesión de la parte Este de la isla, dispuso una serie
de medidas, con el propósito de asegurar su unificación. Una de las medidas fue
la abolición de la esclavitud, que benefició alrededor de 8 mil esclavos. Pero
aunque logró liberarlos, los obligó a permanecer en las parcelas de tierra, para
que trabajaran las tierras de los esclavistas, tratando así de conciliar sus
intereses económicos, políticos y sociales.
Internacionalizó los mecanismos jurídicos y políticos, dividiéndolos
notablemente en diversas unidades, también impuso la medida de representatividad
de las poblaciones por electores en diversos niveles y la puesta en vigencia del
código civil francés en toda la isla. Impuso el servicio militar, restringió el
uso de la lengua española, y eliminó las costumbres tradicionales, como
laspeleas de gallos. Reforzó la percepción de sí mismos de los dominicanos en
que eran diferentes a los haitianos en "idioma, raza, religión y costumbres
nacionales."
También desarrolló en gran plenitud el nuevo modo de producción agrícola, el
cual se hizo dominante en toda la isla como la principal actividad comercial y
económica.
En 1827 se da una situación crítica para el gobierno, debido a que los
ciudadanos se opusieron rotundamente a pagar impuestos, que fue una de las
medidas decretadas por Boyer. Este apeló luego al recurso de emitir papel
moneda, iniciándose así un proceso de devaluación del gourde, que era la moneda
oficial en ambos lados de la isla. Al mismo tiempo aumentó el descrédito
internacional del gobierno de Boyer.
Ante esta situación, muchos sectores empezaron a conspirar contra el gobierno
dictatorial de Boyer, formándose así grandes protestas y nuevos movimientos
integrados por pequeños campesinos, los cuales no tenían medios ni interés en
desarrollar renglones mercantiles regulares, ya que no tenían mano de obra ni
recursos financieros. A principios de 1830 muchos comerciantes habían sido
explotados, y por esa razón, muchos de éstos solo producían para el mercado lo
imprescindible para procurarse algunos artículos manufacturados provenientes del
exterior.
Una de las medidas más fuertes del régimen fue la prohibición a todos los
dominicanos de dedicarse al intercambio comercial, ya que sólo podían mercadear
las personas de origen extranjero, los ciudadanos de origen haitiano y los
representantes de casas comerciales internacionales.
El dominicano que quisiera dedicarse a dicha actividad debía juramentarse
como ciudadano haitiano. Con esta medida, la reacción de todos los dominicanos
no se hizo esperar, incrementándose aún más los movimientos conspiradores
contra Boyer. Otro hecho importante con el cual se iniciaron los planes de
independencia, fue el enfrentamiento que tuvo la Iglesia Católica contra el
gobierno de Boyer, ya que éste confiscó los terrenos y bienes de la Iglesia.
También el choque directo con el Arzobispo Pedro Valera repercutió en toda la
población, la cual vio en esas y otras medidas un conjunto de prohibiciones de
sus derechos políticos, económicos y sociales, así como sus derechos
humanos.
La limitación de celebraciones de las fiestas religiosas, la prohibición de
los juegos de gallos y de azar, la obligatoriedad de las labores agrícolas, el
no uso del español en los actos y documentos oficiales, el cierre de la
universidad, el reclutamiento militar de todos los jóvenes y el pago de los
impuestos, fueron medidas que contribuyeron a la revuelta contra el gobierno
haitiano.
Guerra por la independencia
Juan Pablo Duarte era joven, educado, un auténtico nacionalista, y el hombre
que ayudó a dirigir e inspirar la Guerra de la Independencia de 1844. Duarte,
junto con varios liberales dominicanos fundó una sociedad secreta en 1838
llamada La Trinitaria. Fue nombrada así porque sus nueve miembros originales se
habían organizado en grupos de tres.
Cada grupo iba reclutando adeptos, mantenimiento estricto secreto, con poco
o nada de contacto directo entre sí, con el fin de minimizar la posibilidad de
ser detectados por las autoridades haitianas. Rápidamente iban llegando muchos
reclutados al grupo, pero fue descubierta y obligada a cambiar su nombre a La
Filantrópica. Sin embargo, continuaron conspirando contra los haitianos.
En 1843, la revolución tuvo un gran progreso: los trinitarios se unieron al
partido liberal haitiano que derrocó al presidente Jean Pierre Boyer. Sin
embargo, los Trinitarios que participaron en el derrocamiento llamaron la
atención del sustituto de Boyer, Charles Riviere-Hérard. Hérard encarceló
algunos Trinitarios y obligó a Duarte a abandonar la isla. Mientras estuvo
exiliado, Duarte buscó apoyo en Colombia y Venezuela, pero no tuvo éxito.
En diciembre de 1843, los rebeldes le pidieron a Duarte que regresara, ya que
tenían que actuar con rapidez porque temían que los haitianos se dieran cuenta
de sus planes de insurrección. En febrero de 1844, como Duarte no había
regresado (por enfermedad), los rebeldes decidieron tomar medidas de todos modos
con el liderazgo de Francisco del Rosario Sánchez, Matías Ramón Mella, y Pedro
Santana, un rico ganadero, que comandaba un ejército privado de peones que
trabajaban en sus tierras.
El 24 de febrero de 1844, los principales miembros de La Trinitaria, se
reunieron esa noche clandestinamente en casa de Francisco del Rosario Sánchez,
para acordar definitivamente los planes y poner fecha inmediata a la
independencia.
El 25 de febrero, ya todos los planes estaban listos para ser ejecutados,
por lo que de inmediato fueron despachados los correspondientes emisarios hacia
las diversas regiones del país, con el claro propósito de dar a conocer las
decisiones tomadas por el grupo que se reunió clandestinamente en casa
de Sánchez.
El 27 de febrero de 1844, los rebeldes, liderados por Sánchez tras la
ausencia de Duarte quien había pedido a su hermano Vicente Celestino dar apoyo
en su lugar, tomaron la Fortaleza Ozama en la capital Santo Domingo. La
guarnición de Haití, tomada por sorpresa y aparentemente traicionada por uno de
sus centinelas, se retiró.
Otro grupo de insurgentes, liderados por Matías Ramón Mella llegaron hasta
la Puerta de la Misericordia donde Mella disparó el legendario Trabucazo de la
Independencia, que al ser escuchado por Sánchez, éste imediatamente izó la
nueva bandera dominicana gritando todos al unísono el lema ¡Dios, Patria y
Libertad!.
La independencia ya no se podía negar y después de muchas luchas,
la República Dominicana había nacido. Se había establecido una forma de gobierno
republicano, en un pueblo libre que rechazaba cualquier imposición extranjera, y
que, a través del proceso de votación, podría dar lugar a una democracia donde
todos los ciudadanos, en teoría, eran iguales y libres.
www.realidadesdepedernales.com Fuente:Elnacional.com.do
0 comentarios:
Publicar un comentario